C. Fructificará el desierto y fluirá manantiales de
agua.
1. El desierto
florecerá y habrá manantiales.
a. 35:1 Habrá
mucha alegría, y gozo, porque el desierto y las áreas solas reverdecerá. En el terreno
que no se cultiva, ahora será un campo fértil, florecerá, como un jardín de rosas.
b. 35:2 Se
alegrarán y cantarán con júbilo. Los sembrados florecerán abundantemente. Tendrán
la gloria del Líbano. La hermosura del Carmelo y de Sharon. Porque ellos verán
la gloria de Jehová, la hermosura de nuestro Dios.
c. 35:3 Fortalezcan
a las manos de los cansados, afirmen a las rodillas los débiles.
e. 35:5 En ese
tiempo, los ojos de los ciegos verán, y los oídos de los sordos escucharán.
f. 35:6 En
aquel tiempo, el cojo se levantará y saltará como un ciervo. La lengua del mudo
cantará. Porque, cavaran pozos en el desierto. Y torrentes de agua fluirán en
la soledad del desierto.
g. 35:7 El
lugar seco, se transformará en estanque. Y el seco en manantiales de aguas. En
la morada de los chacales, en su guarida, habrá cañas y juncos.
D. Los redimidos de Israel
regresarán por un nuevo camino.
1. Se abrirá camino por
el desierto para su pueblo.
a. 35:8 Allí habrá
camino y calzada. Será llamado Camino de Santidad. No pasará inmundo por él. Si
no que él mismo estará con ellos. El que anduviese en este camino. Por muy torpe
que sea, no se extraviará.
b. 35:9 Allí no
habrá león, ni fiera subirá por él, ni allí se hallará. Para que caminen los
redimidos.
c. 35:10 Los
redimidos de Jehová volverán, y vendrán a Sión con alegría. Será sobre sus
cabezas, habrá gozo perpetuo. Tendrán gozo y alegría. No habrá tristeza, ni llantos.
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