IV. Profecía a Judá en los días
de Acaz.
A. Siria e Israel van a combatir
en contra de Judá.
1. Siria e
Israel no pudo combatir contra Judá.
a. 7:1
Aconteció en los días de Acaz hijo de Jotam, hijo de Uzías, rey de Judá. El rey
Rezín de Siria y Peka hijo de Remalías, rey de Israel. Se dirigieron contra
Jerusalén para combatirla. Pero no la pudieron tomar.
b. 7:2 La
noticia llego a la casa de David, escuchando: Siria se ha confederado con
Efraín. Se estremeció el corazón del rey. Y el corazón de su pueblo, como se
estremecen los árboles del monte cuando sopla el viento.
B. Profecía a Acaz, Siria e Israel
no podrán derrotar a Judá.
1. Deben creer
que Siria e Israel, no tendrán éxito contra Judá.
a. 7:3 En esa época, dijo Jehová a Isaías: Sal ahora,
ve al encuentro de Acaz, tú, y Sear-jasub tu hijo. Al extremo del acueducto del
estanque de arriba. En el camino de la heredad del Lavador.
b. 7:4 Dile: Guarda reposo, tranquilizate, no temas,
ni se turbe tu corazón. A causa de estos dos cabos de tizón que humean. Por el
ardor de la ira de Rezín, de Siria, y del hijo de Remalías.
c. 7:5 El Sirio, con Efraín y con el hijo de
Remalías, ha acordado un consejo maligno contra ti.
d. 7:6 Han dicho: Vamos contra Judá y
aterroricémosla. Repartámosla entre nosotros. Y coloquemos en medio de ella,
por rey, al hijo de Tabeel.
e. 7:7 Por tanto, Jehová el Señor dice así: No
subsistirá, ni será.
2. Efraín
dejará de ser pueblo en 65 años.
a. 7:8 Porque la cabeza de Siria es Damasco, y la
cabeza de Damasco, Rezín. Dentro de sesenta y cinco años Efraín será
quebrantado hasta dejar de ser pueblo.
b. 7:9 La
cabeza de Efraín es Samaria, y la cabeza de Samaria el hijo de Remalías. Aunque
ustedes no lo creen. La verdad es que no permanecerán.
C. Dios le da señal al rey Acaz
sobre la promesa de salvación.
1. Dios habló
al rey Acaz sobre el salvador.
a. 7:10 También Jehová habló a Acaz.
b. 7:11 Le dijo: Pide para ti señal de Jehová tu Dios,
demandando. Ya sea de abajo en lo profundo, o de arriba en lo alto.
c. 7:12 Respondió Acaz: No pediré, y no tentaré a
Jehová.
d. 7:13 Dijo en ese momento Isaías: Oiga ahora, casa
de David. ¿Les es poco molestar a los hombres, si no también quieren molestar a
mi Dios?
2. Nacimiento y humanidad del Señor Jesús.
a. 7:14 Por tanto, el Señor mismo les dará señal: Mira, la
virgen concebirá, dará a luz un hijo, y llamará su nombre Emanuel.
b. 7:15
Comerá mantequilla y miel. Hasta que sepa desechar lo malo y escoger lo bueno.
c. 7:16 Porque antes que el niño sepa desechar lo malo y escoger
lo bueno. La tierra de los dos reyes que tú temes, será abandonada.
3. El tiempo de la venida del salvador.
a.
7:17 Jehová hará venir sobre ti, sobre
tu pueblo y sobre la casa de tu padre, días en los cuales nunca han venido. Desde
el día que Efraín se apartó de Judá, para aliarse con el rey de Asiria.
b.
7:18 Acontecerá, en aquel día, silbará
Jehová a la mosca que está en el fin de los ríos de Egipto, y a la abeja que
está en la tierra de Asiria.
c.
7:19 Vendrán y acamparán, todos en los
valles desiertos, en las cavernas de las piedras, en todos los zarzales. Y en
todas las plantas.
d.
7:20 En aquel día, el Señor raerá con
navaja alquilada. El pelo desde la cabeza a los pies. Aún quitará también la
barba. Con los que habitan al otro lado del río es decir; el rey de Asiria.
4.
La alimentación de la gente que quede en la tierra
desolada.
a.
7:21 Acontecerá en aquel tiempo, que criará un hombre, una vaca y dos ovejas.
b.
7:22 A causa de la abundancia de leche que darán las vacas, comerá mantequilla.
Ciertamente, mantequilla y miel comerá. Aquellos que queden en medio de la
tierra.
5.
La tierra será desolada, producirá espinos y caldos.
a.
7:23 Acontecerá también en aquel tiempo,
que el lugar donde había mil vides que valían mil siclos de plata, será para
espinos y cardos.
b.
7:24 Con saetas y arco irán allá. Porque
toda la tierra será espinos y cardos.
c. 7:25 A
todos los montes que se cavaban con azada, no llegarán allá. Por el temor de
los espinos y de los cardos. Si no que serán para pasto de bueyes y para ser
hollados de los ganados.
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